lunes, 31 de agosto de 2009

El Beso Traidor de Rafael Espada

Esto me llegó a Facebook:

La falta de filo de Espada dejó pasar la muerte de aquel que confió en él, y su hipocresía lo convierte en cómplice.

Fue como el beso de Judas. “Judas, el traidor, les había dado una contraseña, diciéndoles: ‘Al que yo bese, ese es. Arréstenlo’. Así que, acercándose a Jesús, dijo: ¡Buenas noches Maestro! Y lo besó. Jesús le contestó: ‘Amigo, lo que has venido a hacer, hazlo’ Entonces los otros se acercaron, echaron mano a Jesús y lo arrestaron” (Nuevo Testamento, Mateo 26: 48, 49, 50).

¿Por qué considero a Rafael Espada, vicepresidente de Guatemala, un traidor? Porque, como lo saben, y lo pueden corroborar varios de los familiares y amigos cercanos del póstumamente célebre Rodrigo Rosenberg, una semana antes de ser asesinado se reunió con Espada para ponerlo al tanto de los hechos que había descubierto con relación al crimen de Khalil Musa y su hija Marjorie Musa, quienes, según Rosenberg, también fueron asesinados por encargo de aquellos que serían los responsables de su propia muerte violenta.

También compartió en esa oportunidad su inquietud de que se hicieran realidad las amenazas de muerte que había recibido en las últimas semanas. Tal y como me lo confirmaron dos fuentes cercanas a Rosenberg, Espada se comprometió a ayudarlo y asumir su responsabilidad como supuesto segundo abordo en el Gobierno de Guatemala. ¡Qué ingenuo Rosenberg que confió en la palabra de Espada! ¿Lo habrá entregado a sus enemigos por un puñado de monedas?

Total, sobra recordar la pusilánime actitud de Espada, recién pasado el asesinato y, sobre todo, su cobardía a la hora de cumplir con sus compromisos, no digamos con el abogado asesinado, sino con los ciudadanos de nuestro país. Sin duda es cómoda la vida de los poderosos, que con sus acciones nos muestran cuál es su escala de valores… y su falta de virtudes.

Y, para colmo de males, y como una indiscutible muestra de su descaro, según una nota de AP, publicada el lunes 24 de agosto en Siglo Veintiuno, en su reciente viaje a Quito, Espada declaró al canal estatal Ecuadortv que “existen procesos desestabilizantes (sic) en la región”, y citó la polémica desatada por el abogado muerto a balazos. “Fue un golpe duro para el país, un intento de desestabilización gubernamental”, mencionó en la entrevista pregrabada.

“El hombre sabio no se expone innecesariamente al peligro, ya que son pocas las cosas por las que se preocupa lo suficiente, pero está dispuesto en las grandes crisis a dar incluso su vida, a sabiendas, de que bajo ciertas condiciones no vale la pena vivir”, dijo mi admirado Aristóteles. La falta de filo de Espada, por complaciente, dejó pasar la muerte de aquel que confió en él, y su hipocresía lo convierte en cómplice de quienes lo mandaron a matar. ¿Podrá dormir en paz?

En fin, como dice Antoine de Saint Exupery en El Principito, esa gran obra literaria imprescindible, al menos para mí: “¡No supe comprender nada entonces! Debí juzgarla por sus actos y no por sus palabras.” Nos conocemos y damos a conocer por nuestras acciones.

“El hombre sabio no se expone innecesariamente al peligro, ya que son pocas las cosas por las que se preocupa lo suficiente, pero él está dispuesto, en las grandes crisis, a dar incluso su vida, a sabiendas que bajo ciertas condiciones no vale la pena vivir.” Aristóteles.

La irracionalidad es evidente en los actos de muchos seres humanos que no poseen bien definidos sus valores o eventualmente pierden su integridad ante un puño de beneficios perversos y se convierten en corruptos o, en el peor de los casos, aflora su verdadero ser.

Escuchando a la valiente periodista amiga, Marta Yolanda Díaz-Durán en su programa de radio “Todo a pulmón” del 26 de agosto de 2009, obtuvo información de fuente confiable –según explicaba- que Rodrigo Rosenberg días antes de su asesinato se había reunido con el Dr. Rafael Espada para ponerlo al tanto de la realidad de los actos criminales de personas importantes en el gobierno de Guatemala. -Las acusaciones de Rosenberg son públicas en el video grabado por él mismo- en dicha reunión aparentemente le informó de las pruebas que poseía, el vicepresidente Espada le ofreció protección, el resto es historia.

Marta Yolanda con gran indignación y valentía acusa al vicepresidente Espada de cobarde. El Dr. Espada fue integrado al partido UNE para darle un rostro de decencia y transparencia al futuro gobierno, el Dr. Espada un exitoso y renombrado cirujano del corazón en los Estados Unidos era el ingrediente de credibilidad necesario para limpiar ante los ojos del electorado la miserable imagen del político guatemalteco.

Lamentablemente los guatemaltecos –mayoritariamente- han perdido la capacidad de asombro, las condiciones de inseguridad extrema han convertido a los habitantes de Guatemala de ciudadanos libres a rehenes de los criminales, se han convertido en seres con mente inactiva, dignos de la metáfora de la rana: La rana si es puesta al fuego lento, en un balde con agua fría, el agua se irá calentando poco a poco, la rana se adapta a cada grado de temperatura hasta que muere y todo sin darse cuenta, caso contrario si la rana se mete en agua hirviendo luchará ferozmente para librarse del peligro.

Da miedo hablar –o escribir- abiertamente de los criminales de cuello blanco, son los más peligrosos, a menudo ejercer la libertad de expresión en Guatemala- haciendo crítica a través de blogs o prensa a los gobernantes tiene sus riesgos y costos tales como amenazas telefónicas, asaltos extraños, vehículos que nos persiguen por algún tiempo, amenazas de supuestos criminales comunes, acoso a la libertad de expresión como el caso de Jan Fernández.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Todo indica que ya estamos cerca de conocer la verdad.